Carlos Baute: "Decíamos que Venezuela no era Cuba, y estamos igual"

 

A una década del éxito que se convirtió en una de las canciones más escuchadas de la música en español, Carlos Baute llega este jueves 14 de abril a Enjoy Punta del Este para iniciar su gira “Colgando en tus manos tour” , que lo llevará a recorrer Argentina y la región.

Con toda la energía acumulada luego de dos años de pandemia, el creador de hits que cantamos todos como “Quién te Quiere como Yo”, “Amarte bien”, “Perdimos el Control”, “En el Buzón de tu Corazón”,“Tu No Sabes que Tanto”, “Te Regalo”, “Ando Buscando” y el nuevo single recién estrenado junto a Chenoa “El Chisme”, regresa a  para reencontrarse con el público y compartir una fiesta inolvidable.

Un poco de historia…

El 24 de octubre de 2014 cantaba por primera vez en Uruguay el cantautor venezolano Carlos Baute. En aquel entonces lo traía su gira En el buzón de tu corazón. Buena energía, carisma pocas veces visto, sin poses, sin divismos, a corazón abierto, cualidades que bastaron para consolidar una conexión única con el público uruguayo. Algo que se replica en cada visita que hace al Río de la Plata.

Baute desde los inicios de su carrera artística cuando tan solo era un niño que soñaba con cantar y cuyas clases pagaba con esfuerzo su familia, no dejó de ser agradecido, con los suyos y con su público, ese que ha logrado conquistar a fuerza de talento, humildad y compromiso con las grandes causas. Porque si hablamos de Baute no podemos dejar de destacar su templanza para mantenerse como número uno en el mundo tan difícil y competitivo de la música.

En su reciente visita a Punta del Este, Uruguay, en entrevista con la periodista Mariana Peralta, el compositor venezolano reflexionó sobre el secreto de mantenerse vigente.

“Me gusta hacer update cada cierto tiempo. Creo que en la música te tienes que mantener actual con lo que está pasando, manteniendo tu onda, pero sin duda los sonidos evolucionan, la música evoluciona y tú lo tienes que hacer. Tengo gente amiga productores muy jóvenes que te ponen al día, yo sigo componiendo mis canciones pero al tener productores jóvenes las producciones se escuchan modernas y eso te hace conectar con el público actual”.

Carlos Baute pone como ejemplos a Cold Play o Ed Sheeran, artistas que admira y escucha y que han logrado mantenerse vigentes sin perder los sonidos de la actualidad.

“Yo me reinvento, pero siempre mantengo la esencia, como compositor están mis melodías, mis letras ahí está mi sello. Cuando eres compositor sigues manteniendo tu esencia”, explica.

Desde el punto de vista profesional y personal Carlos asegura sentirse más maduro. Una carrera consolidada y una familia afianzada junto a Astrid su esposa quien ha sido un pilar y cable a tierra fundamental para que su carrera musical funcione de maravillas.

“Personalmente estoy muy feliz y a nivel de carrera muy agradecido. Mantenerte durante tantos años en el mundo de la música es complicado, salir pueden salir muchos éxitos, pero mantenerte no es fácil”, confiesa en diálogo con Cultura360.

“Gracias a Dios puedo seguir viviendo de la música que es mi pasión y con la familia estoy enamorado, babeado (risas), amo a mi familia, vivo por ellos trabajo por ellos. Son mi base, mi motor”, afirma mientras confiesa que minutos antes de esta entrevista había hecho una videollamada con España para comunicarse con su esposa y sus tres hijos.

El compromiso de Carlos Baute con las causas sociales y en especial con la situación que viven millones de compatriotas venezolanos ha sido su desvelo.

Desde que llegó el régimen chavista a Venezuela, Carlos Baute ha sido uno de los artistas que más ha criticado la situación política y social del país caribeño. Ese régimen comunista que hoy continúa Nicolás Maduro ha generado que el músico no pueda regresar a su tierra natal.

Hace 12 años que Carlos Baute no visita Venezuela. En diálogo con Cultura360 recuerda su reciente charla con su mánager y las ganas que tiene de regresar a su tierra para reencontrarse con sus raíces, tierra hoy devastada por un dictador que rompió los sueños de un pueblo maravilloso y que los ha sumido en la pobreza arrebatando sueños y posibilidades de progresar honestamente.

Cuando Carlos Baute habla de su país natal, sus ojos se iluminan más que nunca, parece un niño que desea recordar aquellos tiempos cuando fue feliz, en un país donde el comunismo no existía. “Necesito ir a Venezuela, necesito el olor a mi tierra, mi gente. Tengo familia y amigos pero es complicado…la última vez que estuve fue una estadía increíble, me reencontré con gente querida, hicimos una gira de shows maravillosa pero luego la pasé muy mal a la hora de salir del país. Me bajaron del avión, fue complicado. Justo cuando estaba arriba del avión - dicen que cuando cierran la puerta estás en el país al que vas - no cerraban la puerta… yo decía: ¿qué raro, estamos todos los pasajeros, qué pasa que no arrancamos?”, rememora.

“ Justo antes de cerrar la puerta me llama una señora y ahí fue complicado… sufrí una amenaza…me amenazaron, me dejaron ir pero fue una amenaza. Estuve en un cuartito, me trataron muy mal… era época de Hugo Chávez, yo me tiré muy fuerte, yo era un opositor a todo pulmón y nunca tuve filtros ni pelos en la lengua para decir lo que realmente es y lo que yo veo y lo que mis amigos y familia me dicen”.

Eso pasó hace 12 años, finalmente Carlos pudo volver al avión y volar hacia España. Desde ese entonces, el miedo impuesto por las autoridades del gobierno venezolano le impidió regresar a su tierra natal para reencontrarse con sus afectos, amigos y su público que tanto añora.

Consultado sobre si cree que el régimen venezolano cambiará algún día, la respuesta no deja de tener un tono de resignación: “es complicado… y más un país donde está metido el narcotráfico, es muy difícil, ya son muchos años y seguimos así desde 1998. Decíamos que Venezuela no era Cuba, y estamos igual!, ya estamos en la mitad de los años de lo que lleva el comunismo de Cuba”, reflexiona con preocupación.

En Venezuela Carlos aún tiene parte de su familia, están su tía y primo. “Ellos no quieren salir y respeto mucho esa decisión cuando la gente quiere estar con su familia. Es complicado, tienen hijos y los hijos quieren estar con sus abuelos y yo la verdad una de las cosas que recomiendo es estar cerca de la familia siempre. Yo que soy inmigrante puedo decir que una de las cosas más terribles que vivimos nosotros es el desarraigo de la familia, tengo familia en EEUU, Canadá España , Australia, Croacia, no tenemos forma de encontrarnos un fin de semana y hacer un asado.

Mi hermana hace muchos años se fue afuera y hecho mucho de menos la familia. Gracias a Dios hay un par de primos que están en España y nos vemos. Mi hermana, sobrino, tíos, primos no están y es una pena”.

La música le ha permitido a Carlos Baute convertirse en un vínculo para ayudar a sus compatriotas aún estando a miles de kilómetros de distancia. Lucha por su Venezuela natal desde el exilio a través de UnaMedicina para Venezuela. Se trata de una fundación para donar medicamentos.

“Tenemos una fundación la cual soy el embajador, es de una amiga, Vanessa Pineda a quien siempre la he acompañado. Creí mucho en su proyecto, hace falta medicina en Venezuela, es complicado el momento en que está desde hace muchos años. Ha sido maravillosa la cantidad de gente que nos ha ayudado”, relata con emoción.

En estos años la fundación ha recibido miles de medicamentos que luego son enviados para Venezuela. El tema más complicado es costear los gastos de envío aéreo, confiesa. “A nosotros nos suelen llegar más de 500 kgs mensuales. Lo complicado ha sido pagar los envíos, es difícil porque cada kilo puede valer un euro, es complicado. A veces se nos quedan medicinas porque no tenemos los fondos. La fundación también hace eventos he hecho programas de tv y dono lo que cobro, y ahí vamos, tirando y seguimos ayudando”, relata.

En la fundación Una medicina para Venezuela todos son voluntarios unidos por una única causa: ayudar a quienes están en Venezuela y no tienen acceso a lo básico: un remedio para calmar el dolor.

 “Todo lo que se hace es para esa gente, la que trabaja ayudando en la fundación es honoraria, lo hacen para ayudar a Venezuela, nadie gana un duro, porque imagínate a veces no nos alcanza ni para pagar el envío aéreo”, relató.

Todos quienes deseen colaborar con la fundación lo pueden hacer desde cualquier punto del mundo. “Si nos quieren ayudar ahí estamos”, alentó Baute con la sonrisa que lo caracteriza.

Clara,  madre y mejor abuela del planeta

Carlos Baute prioriza sus afectos y destaca tener cerca a su madre Clara quien desde hace años salió de Venezuela y se encuentra en España. Clara es modista y no duda en consentir a sus pequeños nietos con diseños y ayudar a su nuera cuando la necesitan.

“Nos ayuda con los niños y los viste con sus diseños. Astrid de vez en cuando compra unas telas y le dice: suegra ¿nos puedes hacer esto?  y a los poquitos días ella les hace unos diseños espectaculares!”, relata sonriente y orgulloso

¡ A mi madre siempre la he amado y respetado pero cuando sos padre dices: ¡Dios mío lo que ha hecho mi madre y lo que sigue haciendo hoy día!. Sin duda es la mejor abuela del planeta, nos ayuda que no te puedo explicar cuánto. Ahorita, mientras yo estoy de gira, estaba ayudando a mi esposa. Los niños la aman, ella no vive con nosotros pero siempre está y cuando Astrid tiene mucho trabajo le dice: hey suegra danos una mano” (risas).

“Mi madre es incansable, yo diría que es la mejor abuela del mundo, fue una gran madre y ahora una super abuela”